Page 92 - Banca Pueyo 125 Anos
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Banca Pueyo. 125 años de historia
del recién estrenado milenio suponen un reto complejo para los negocios ban-
carios de los Pueyo. De alguna manera, es el tercer siglo en el que la presencia
de la familia afronta una situación exigente dentro de un mercado lleno de difi-
cultades, pero la filosofía sigue siendo la misma y se está preparado para las
exigencias del mercado, dicho sea de paso cada vez más voraz, pues los grupos
financieros tienen una capacidad enorme para abarcar productos y mercados
en los que la competencia se hace bastante compleja para hacerlo en condicio-
nes de igualdad. Es ahora, en 2002, cuando se incorpora al banco un miembro
de la cuarta generación de la familia del Pueyo. Se trataba de Francisco Javier
del Pueyo Villalón, quien después de una larga formación4, empieza a tomar el
pulso en el día a día de la entidad.
Pero la senda está marcada y hay que seguir marchando sobre el
camino trazado. Sin duda alguna se produce un hecho significativo para la his-
toria de Banca Pueyo, S.A. cuando abre su primera sucursal fuera de Extrema-
dura y lo hace precisamente en Madrid, una oficina de esquina entre las calles
de Luchana y Juan de Austria, en el barrio de Cham-
berí. La apertura de esta nueva sede es un salto cua-
litativo en la entidad, que progresivamente va
transgrediendo límites territoriales. No se debe olvidar
que treinta años atrás existía tan solo la oficina de
Villanueva de la Serena y que en esta etapa cuenta
con una red básicamente extremeña, y ahora una
más en la capital de España, el mentidero financiero
del país. La necesidad de acercarse al centro de deci-
siones requería de una presencia constante que se
ha visto culminada en estos momentos. No obstante,
el modelo Pueyo continúa en marcha y no se pierden
las referencias que han hecho del éxito su forma de
trabajo, de modo que en el siguiente año continúa la
política expansiva.
Por otra parte, un hecho luctuoso ocurre en
agosto de 2002: el fallecimiento de Petra Cortijo Álva-
rez, Presidenta de Honor de Banca Pueyo, S.A. y
viuda de Ricardo del Pueyo y Pueyo, primera presi-
Primera sucursal de denta de una institución bancaria en la historia de
Banca Pueyo en Madrid España y presidenta de un consejo de administración
que, como dijimos en su momento, estuvo formado única y exclusivamente por
mujeres. Con ella se fue una etapa que coincidió con el inicio de la puesta en
marcha de la sociedad anónima y de su consolidación, convirtiéndose además
en un elemento de cohesión para toda la familia. Su vacío supondrá un punto y
seguido en la historia de la Banca, pero sin duda alguna, destacaríamos que su
presencia resultó decisiva en el desarrollo de la entidad a lo largo de las últimas
décadas, como resultará su ausencia en los años venideros.
En la estrategia empresarial de expansión está Madrid en el horizonte, y
más concretamente su área metropolitana, donde se asienta una enorme can-
tidad de extremeños que emigraron en los sesenta y formaron una gran colonia,
ahora ya en segundas y terceras generaciones. De ahí que en 2003 se abrieran
las sucursales de Móstoles (206.000 habitantes) y Alcorcón (170.000 habitantes),
dos localidades del sur de la capital que poseen una clientela potencial y con
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del recién estrenado milenio suponen un reto complejo para los negocios ban-
carios de los Pueyo. De alguna manera, es el tercer siglo en el que la presencia
de la familia afronta una situación exigente dentro de un mercado lleno de difi-
cultades, pero la filosofía sigue siendo la misma y se está preparado para las
exigencias del mercado, dicho sea de paso cada vez más voraz, pues los grupos
financieros tienen una capacidad enorme para abarcar productos y mercados
en los que la competencia se hace bastante compleja para hacerlo en condicio-
nes de igualdad. Es ahora, en 2002, cuando se incorpora al banco un miembro
de la cuarta generación de la familia del Pueyo. Se trataba de Francisco Javier
del Pueyo Villalón, quien después de una larga formación4, empieza a tomar el
pulso en el día a día de la entidad.
Pero la senda está marcada y hay que seguir marchando sobre el
camino trazado. Sin duda alguna se produce un hecho significativo para la his-
toria de Banca Pueyo, S.A. cuando abre su primera sucursal fuera de Extrema-
dura y lo hace precisamente en Madrid, una oficina de esquina entre las calles
de Luchana y Juan de Austria, en el barrio de Cham-
berí. La apertura de esta nueva sede es un salto cua-
litativo en la entidad, que progresivamente va
transgrediendo límites territoriales. No se debe olvidar
que treinta años atrás existía tan solo la oficina de
Villanueva de la Serena y que en esta etapa cuenta
con una red básicamente extremeña, y ahora una
más en la capital de España, el mentidero financiero
del país. La necesidad de acercarse al centro de deci-
siones requería de una presencia constante que se
ha visto culminada en estos momentos. No obstante,
el modelo Pueyo continúa en marcha y no se pierden
las referencias que han hecho del éxito su forma de
trabajo, de modo que en el siguiente año continúa la
política expansiva.
Por otra parte, un hecho luctuoso ocurre en
agosto de 2002: el fallecimiento de Petra Cortijo Álva-
rez, Presidenta de Honor de Banca Pueyo, S.A. y
viuda de Ricardo del Pueyo y Pueyo, primera presi-
Primera sucursal de denta de una institución bancaria en la historia de
Banca Pueyo en Madrid España y presidenta de un consejo de administración
que, como dijimos en su momento, estuvo formado única y exclusivamente por
mujeres. Con ella se fue una etapa que coincidió con el inicio de la puesta en
marcha de la sociedad anónima y de su consolidación, convirtiéndose además
en un elemento de cohesión para toda la familia. Su vacío supondrá un punto y
seguido en la historia de la Banca, pero sin duda alguna, destacaríamos que su
presencia resultó decisiva en el desarrollo de la entidad a lo largo de las últimas
décadas, como resultará su ausencia en los años venideros.
En la estrategia empresarial de expansión está Madrid en el horizonte, y
más concretamente su área metropolitana, donde se asienta una enorme can-
tidad de extremeños que emigraron en los sesenta y formaron una gran colonia,
ahora ya en segundas y terceras generaciones. De ahí que en 2003 se abrieran
las sucursales de Móstoles (206.000 habitantes) y Alcorcón (170.000 habitantes),
dos localidades del sur de la capital que poseen una clientela potencial y con
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